Escrito por Johana Vicente
En julio, después de semanas de duro trabajo y capacitación, graduamos a la clase de padres y jóvenes dedicados como Promotores de Justicia Ambiental del 2017, la segunda clase del programa.
A lo largo del año, Chispa Maryland trabajó con padres, estudiantes y personal de la Escuela Primaria Rosa Parks en Hyattsville, MD para proporcionar talleres donde las familias tuvieron la oportunidad de aprender acerca de las aguas pluviales y cómo afectan a su comunidad. A través de estos talleres, aprendieron sobre temas como la contaminación del agua, la escorrentía y su cuenca local. No sólo aprendieron sobre los problemas, sino que también implementaron soluciones construyendo un jardín polinizador y de vegetales en la escuela, entre otros.
Después de estos talleres, era hora de que nuestros padres se convirtieran en Promotores. Y así comenzó su capacitación para ser Promotores donde obtuvieron las herramientas para llevar este conocimiento a sus comunidades.
Mientras nuestros padres estaban entrenando, sus hijos también estaban dedicados a aprender y explorar. Aprendieron sobre los problemas ambientales locales y exploraron al aire libre para ver cómo estos problemas están afectando a sus comunidades. Ellos crearon arte y hablaron sobre sus experiencias a través de este proceso.
Queremos felicitar a nuestra clase de Promotores del 2017 y esperamos que continúen trabajando para abogar por los cambios necesarios para mejorar sus comunidades. Las voces de nuestros Promotores son ahora más importantes que nunca, tanto en la comunidad como en el movimiento ambiental.
Nuestros Promotores aprendieron mucho de Chispa Maryland, pero nosotros también aprendimos mucho de ellos. Aprendimos sobre sus experiencias y sus comunidades y sobre su pasión y compromiso para proteger nuestra madre tierra. ¡Estamos muy contentos de seguir trabajando con nuestros nuevos Promotores y continuar este aprendizaje mutuo!
¡Felicidades!